Actualmente, este procedimiento se realiza en un tiempo estimado de entre 30 y 60 minutos, dependiendo de la dificultad del caso.

No, la colocación de estos implantes es una cirugía oral menor que se realiza bajo anestesia, por lo que resulta completamente indolora. Dado que el hueso carece de nervios y se utiliza anestesia para operar la encía, el procedimiento se lleva a cabo sin molestias significativas, y el tiempo de recuperación posterior es bastante tolerable.

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Estos implantes tienen una vida útil promedio de 15 a 25 años. En la mayoría de los casos, el implante en sí es permanente, ya que el material con el que está hecho se fusiona con el hueso maxilar, lo que permite que dure mientras el hueso de la mandíbula esté presente.

La ventaja que tiene los implantes frente a los demás es:

• Apariencia más realista

• Durabilidad a largo plazo

• Comodidad

• Preservación de los dientes restantes

• Mejora de la función oral

• Preservación del hueso

• Mayor confianza

• Facilidad de cuidado

• Mejora de la digestión

El implante dental puede ser rechazado tempranamente si el hueso aún no ha completado su proceso de curación. Esto ocurre porque el cuerpo reacciona rechazando el implante como una sustancia extraña o debido a una posible alergia al metal no detectada.